Recuerdo con mucho cariño la primera vez que escuché unos altavoces Sonus Faber. Era el año 1992 y fue en Londres en una tienda que se llama Walrus Audio. Escuché las Extrema y creo que me enamoré perdidamente de esos altavoces. Costaban un dineral y por supuesto, yo no me los podía comprar ni en sueños… amor platónico…
Al cabo de un tiempo escuché las Minima, Electa Amator, Guarneri, Concerto… ¡Qué bien sonaban todas! Con un tamaño tan pequeño creaban un sonido grandioso y ¡que frecuencias medias!. Luego fueron imitadas por muchos fabricantes de altavoces, pero ninguno conseguía esa magia. En fin, una maravilla de altavoces.
Pero nadie es perfecto y Sonus Faber tampoco. Franco Serblin, el dueño de S.F., se fue alejando del diseño directo de los productos y S.F. y empezó a fabricar “cosas” mas económicas que ya no sonaban a Sonus Faber. Es cierto que los productos por encima de las Cremona seguían sonando muy bien, pero ya no tenían esa magia de los productos iniciales de esa marca, bueno con alguna excepción y la gama “económica” era cada día más vulgar.
Ahora, dentro de la gama “económica” los chicos de S.F. nos sorprenden con su última genialidad. Las sustitutas de las Liuto, los altavoces Venere, ¡se fabrican en China!… hay madre ¡¡¡qué miedo!!! ¿Tan caro es fabricar en Italia productos de Alta Gama?, no me imagino a Ferrari construyendo sus coches en China ni a Salvatore Ferragamo, Prada, Gucci, etc… preparando sus colecciones allí.
Vamos a ser buenos, además otros muchos fabricantes ya han “caído en la tentación China” muchos años antes que Sonus Faber. Ahora ya en serio, la gama Venere que tenemos en tienda comprende, las Sonus Faber Venere 1.5, Sonus Faber Venere 2.5 y Venere Center. Para la prueba he conectado las Venere 1.5, Venere Center, Toy y un subwoofer a un sistema de cine en casa y las Venere 2.5 a un amplificador estéreo.
Además, hace unas semanas probé las Sonus Faber Venere 1.5 con un sistema de Simple Audio y el resultado, a pesar de la falta de rodaje, fue bueno. Voy a empezar precisamente por estas.
Las Sonus Faber Venere 1.5 son unos altavoces de dos vias con puerto réflex frontal. Están disponibles en dos acabados, blanco y negro, y son excelentes, ¡estooos Chinooos! Próximamente estarán disponibles en el acabado de madera y serán aún más bonitas… Tienen una forma extraña, como de lira. Se pueden bicablear o biamplificar. Hay unos soportes dedicados para estos altavoces absolutamente recomendables.
Aunque les falta rodaje, con música no me dejaron indiferente, las frecuencias medias y la escena sonora (amplitud y altura) me parecieron fantásticas, muy Sonus Faber. A los agudos les queda un montón de horas de rodaje y a los graves también. El sonido en general es bueno, ya veremos qué pasa cuando estén bien rodadas. Con lo que resultó ser “la bomba” es en Cine en Casa, el central es alucinante, con unos diálogos perfectos y CLAROS. Los altavoces Sonus Faber Venere 1.5 dan precisión, contundencia y un reparto espacial propio de altavoces más caros, de acuerdo que el subwoofer que usé, esto es un secreto, era tremendo pero el resultado final me dejó boquiabierto, sin palabras. Para configurar un Cine en Casa de altos vuelos sin arruinarse en el intento son un 10 sobre 10.
¿Y las Sonus Faber Venere 2.5?, bueno… les falta rodaje, mucho. Por ahora suenan a todo menos a Sonus Faber, pero esto no es una crítica, no que va. Con el poco rodaje que llevan dan una escena sonora muy buena y creíble. Las frecuencias medias ya son muy elaboradas, con una reproducción de la voz excelente (este ha sido siempre el sello de Sonus Faber). Las frecuencias agudas son un poco apagadas, y esto es raro, porque S.F. no es precisamente “apagado de agudos”, cambié cables y el agudo siguió apagado. Los graves fueron generosos y bastante controlados para un altavoz semi rodado. La Sonus Faber Venere 2.5 es un buen producto para su precio. Pienso que una vez rodados serán unos altavoces para tener muy en cuenta. Mi opinión es que son un poco apagados de agudos pero en el resto de frecuencias cumple, con nota, lo esperado de estos altavoces. Supongo que si en vez de en China, estuvieran fabricados en Italia tendrían un precio más alto, pero al resultado me remito. Los altavoces Sonus Faber Venere son muy recomendables.